Morer Núñez, Julio

BIOGRAFÍA

Carlos Hernández Latas estuvo durante muchos años confundido respecto a cuál había sido la trayectoria personal de su tío abuelo Julio Morer Núñez. Nos conocimos en abril de 2009, durante la presentación, en el Colegio Pedro Cerbuna de Zaragoza, del libro “Triángulo Azul” de Mariano Constante y Manuel Razola que había reeditado el Gobierno de Aragón en colaboración con la Amical de Mauthausen. De forma breve me explicó lo poco que conocía de las peripecias vitales de su tío y manifestó el interés que tenía por saber algo más sobre él.

Según la tradición familiar, Julio se había afincado en Francia siguiendo los pasos de una cupletista, haciendo honor a la fama de galán que había conseguido hacerse entre su círculo de amistades y como parece confirmar la observación de alguna de las fotografías conservadas por la familia, habiendo desaparecido sin haber vuelto a dar señales de vida.

No hace muchos años, según nos cuenta Carlos, un tío suyo, que a la vez era sobrino de Julio Morer, comentó a la familia que tenía una carta donde su tío le explicaba que había pasado por un campo de concentración alemán y que había sobrevivido por haber estado destinado en la cocina. La familia de este zaragozano pudo corroborar que el aquel comentarioera cierto al comprobar que su nombre aparecía en el “Libro Memorial. Españoles deportados a los campos nazis (1940-1945)”, publicado por el Ministerio de Cultura en el año 2005.

Poco es lo que sabemos sobre Julio. Nació en Zaragoza el 1 de septiembre de 1910 y su juventud debió transcurrir en la capital aragonesa. De alguna forma participó activamente en la Guerra puesto que conocemos su nombramiento como militar del ejército republicano a finales de 1938. Hemos de suponerle un itinerario similar al de los miles de republicanos exiliados en 1939. Estuvo interno en los campos de refugiados el sur de Francia, desde donde se alistó en una de las Compañía de Trabajadores Extranjeros que salieron para realizar trabajos defensivos en diversas zonas fronterizas con Alemania.

Cuando fue detenido por los alemanes en junio de 1940, fue trasladado, junto a sus compañeros de Compañía, al frontstalag 142 situado en la localidad de Besançon. Su estancia en los campos de prisioneros de guerra alemanesfue bastante larga si la comparamos con el grueso de los deportados republicanos. Julio había sido internado en el stalag VI B (Neu-Versen, Baja Sajonia) según los datos aportados por la Fondation Pour la Memoire de la Deportation (FMD) y deportado a Mauthausen en un transporte donde estuvo acompañado por el republicano asturiano Hermógenes Roca Bustes. Ambos ingresaron en el campo austríaco el 29 de septiembre de 1941, Julio tenía 31 y se le adjudicó la matrícula 6700. Unas semanas más tarde fue destinado a Gusen con una nueva matrícula, la 33448. Dos años después, en diciembre de 1943, regresó de nuevo a Mauthausen, lugar en el que le sorprendió la liberación del campo en mayo de 1945.

Tras la repatriación, se instaló en Francia y lo único que hemos encontrado, hasta el momento, ha sido su hospitalización, en el otoño de 1952, en la población de Ris-Orangis. Nada más sabemos sobre Julio, sobre sus posibles contactos con su familia y sobre su historia personal. Su recuerdo se difumina y se pierde en el oscuro recuerdo de una familia que sólo conserva la anécdota de aquella supuesta una fuga, con una cupletista a tierras francesas, cuando su historia real fue muy distinta al verse inmerso en el drama colectivo de los millares de personas que, en toda Europa, sufrieron deportación a los campos de la muerte alemanes.

Fuente:

Carlos Hernández Latas